Varios XIX: "A mi esto me suena..."

Los que siguen habitualmente este blog, saben que los temas de mi carrera que se relacionan con la Psicología y con los aspectos de la mente siempre me han gustado y me gusta reflexionar acerca de ellos, una experiencia que siempre me ha llamado mucho la atención es el llamado "déjà vu", definido como la experiencia de sentir que se ha sido testigo o se ha experimentado previamente una situación nueva. Esta experiencia suele ir acompañada por una convincente sensación de familiaridad y a la vez por un sentimiento de rareza. Hay varios tipos de déjà vu, uno de ellos es el déjà veçu, cuando experimentamos la sensación de algo ya vivido, otro, es el déjà senti, término acuñado para la sensación de rememorar algo ya sentido, y por último el déjà visité, que se usa para definir la experiencia de haber estado ya en un sitio. Este hecho es muy común, y más del 60% de la población afirma haber sentido este "síntoma" alguna vez, se correlaciona clínicamente con ansiedad o con alguna enfermedad psiquiátrica crónica, aunque la asociación patológica más fuerte es con la epilepsia del lóbulo temporal, en algunas ocasiones puede llegar a ser fisiológico. A lo largo de la entrada, entenderéis el porqué de esta explicación. Este fin de semana había varios eventos cestistas de bastante interés, el sábado por la mañana, en el Pabellón Federico de Arce se celebraba el "I Torneo Manuel Martínez" de categoría benjamín, organizado por el C.B. Murcia, en honor al que fuera durante bastante años presidente de la federación y que trabajó mucho por aumentar el desarrollo del baloncesto de base en la Región, me pidieron ayuda para arbitrar una de las dos semifinales, el tercer y cuarto puesto y la final, y fui encantado a colaborar con esta iniciativa. Una semifinal la disputaron en C.B. Murcia A contra el C.B. Murcia B, los pronósticos se cumplieron y fue el grupo A del club organizador el que accedió a la final, en la otra semifinal, el Marme, venció al Rayo Moratalla. En la final, el C.B. Murcia A, dirigido por Willy Llorca, venció por 84 a 60 al equipo de San Javier en un precioso partido, que tuve la oportunidad de arbitrar, el Rayo Moratalla logró el tercer puesto al vencer por 10 puntos al C.B. Murcia B. Es todo un lujo, poder ver el buen trabajo que realizan algunos clubes en estas categorías, me gustaron todos los equipos, es increíble ver las cosas que hacen chavales a los que la talla más pequeña de pantalones les llega un palmo por debajo de la rodilla. Enhorabuena a todos los entrenadores del torneo por la labor tan importante que hacen, esa edad es clave para enganchar al jugador al deporte y para el desarrollo de su coordinación motora además de habilidades baloncestísticas, aspectos fundamentales para los pasos posteriores en la formación de los jugadores, si se ponen unos buenos cimientos, el edificio tendrá más posibilidades de salir bien. Tras la entrega de trofeos por parte de Jose Antonio Marco Gaona a los equipos participantes, unas palabras de la hija de Manuel Martínez, y un breve discurso de Braulio Arias, director de la escuela del C.B. Murcia, se puso punto y final a esta iniciativa, muy positiva a mi modo de ver y que espero se pueda repetir en temporadas próximas. Otro evento baloncestista se ha venido desarrollando desde el Jueves 4 de Junio en el Pabellón Príncipe Felipe de San Javier, estos días se disputaba allí el sector Infantil masculino correspondiente a la zona centro, en el que participaba el campeón regional de Murcia, el C.B. Murcia, en la primera fase de grupo, quedó segundo clasificado, tras ganar a Azuqueca, y a Estudiantes y perder contra Pamesa Valencia, lo que dejaba para la jornada matutina del Domingo el partido decisivo contra Fuenlabrada, campeón de Madrid y campeón del otro grupo del intersector, si se conseguía la victoria, se lograba plaza para el Campeonato de España. Visto lo importante del evento, avisé a varios buenos amigos míos para irnos juntos a disfrutar de ese partido y de la otra final, que disputaban antes Pamesa Valencia y Estudio A de Madrid. Así que bien tempranito, con alguna baja en nuestras filas, salimos hacia San Javier, para ver la primera final, fue un partido muy bonito, en el que el equipo madrileño planteó una defensa mixta, un triángulo y dos, que le dió buen resultado, ya que maniataban a los jugadores exteriores más importantes y les permitía cerrarse muy bien en situaciones de poste medio contra el center de Pamesa, un chaval de color que era muy poderoso físicamente. El equipo valenciano no llegó nunca a obtener una distancia tranqulizadora en el marcador, pocas veces la misma alcanzó cifras superiores a 5-7 puntos, en el último cuarto, el desgaste de muchos minutos consecutivos de la defensa planteada por el equipo madrileño y la lesión de su jugador interior condicionaron que no pudieran llegar a ganar el partido, perdiendo por 11 puntos, hecho que no empaña el buen trabajo realizado ante un equipo físicamente muy superior y muy bien trabajado como Pamesa Valencia. Tras este interesante partido, comenzó la segunda final entre el C.B. Murcia y el Fuenlabrada, equipo muy físico este último, con un jugador por encima de los dos metros y varios que lo rozaban. En el primer cuarto, Murcia sacó un quinteto grande, mientras que Fuenla obtaba por un cinco más pequeño y móvil, al final del cuarto, los "pequeños" ganaban por dos puntos, en el segundo cuarto se invertían las tornas, el Fuenla obtaba por una combinación de jugadores muy grandes todos ellos, el Murcia, confiaba en jugadores más rápidos y con menos estatura, pienso que ante la diferencia de estatura, todos en el pabellón, temíamos que los madrileños iban a romper el partido en ese cuarto, el problema no vino tanto por la diferencia de estatura, sino por la agobiante presión que Fuenla hizo al Murcia, a pesar de ello, los jugadores capitalinos no le perdieron nunca la cara al cuarto y se llegó al descanso con una ventaja de alrededor de 10 puntos para "los grandes" de Fuenla. Tras el paso por los vestuarios, se pusieron en la pista casi los mejores quintetos, y las diferencias se estrecharon, gran parte de la culpa de ésto, la tuvo el jugador del murcia, Joel García, que imprimió un ritmo trepidante al choque, sobre todo en situaciones de contraataque, que ayudado por David Lucas "desde la base", lograba culminar de todas las formas y frente a cualquier rival, midiese lo que midiese, impresionante lo de este chaval. Al comenzar el último cuarto siguió la misma tónica, y se llegó al final del partido con total igualdad. Tanto es así que tuve casi un déjà vu, pues a falta de 8 segundos, Murcia ganaba de 1 y sacaba Fuenlabrada!!!!!, os suena???¿?, a la gente que vió la final cadete femenina seguro que sí, tras el tiempo muerto madrileño, optaron por jugar un 1c1 desde fuera de 6-25 contra el pívot murciano, tras varios rebotes y un tiro que no toca aro, un jugador madrileño coge el balón en siete metros, se orienta hacia el aro en el aire, tira un triple, nada más salir de la mano suena la bocina y entra el tiro (esto también me suena), con lo que gana para su equipo una plaza para la disputa del Campeonato de España de este año. Es duro perder de esa forma en un partido de esa trascendencia, pero hay que quedarse con lo logrado, y no con la pizca que ha faltado, ver siempre el vaso medio lleno y no medio vacío, desde aquí desear los mejor a Fuenlabrada y a Pamesa que se han clasificado para el nacional, y felicitar a los demás equipos, por el buen trabajo realizado, en especial al C.B. Murcia, que por desgracia no ha podido poner el broche perfecto a una inmaculada temporada. Si comenzaba la entrada con una versión de la canción de Beyoncé, "Déjà vu", os voy a dejar con un tema de Cascada, llamado "What hurts the most", adecuado para reflejar lo duro que es perder de la forma que he podido vivir dos casos esta temporada, es casi como tirar una moneda al aire, lo cual no indica que no sean triunfos merecidos, espero que os guste.